Además, Metrovacesa buscará sinergias dentro de las actividades de la propia empresa y redefinirá sus distintos procesos, para evitar "duplicidades en el negocio".

Así lo anunció hoy el presidente de la compañía, Vitalino Nafría, en su intervención ante la junta general de accionistas, la primera del grupo tras quedar controlado por un grupo de seis entidades financieras que ejecutaron la deuda de la familia Sanahuja, su anterior accionista de control.

Metrovacesa prevé traducir estas líneas básicas en un plan estratégico que cuente con objetivos numéricos y horizontes temporales, que podría estar listo para después del verano, según indicaron a Europa Press en fuentes de la empresa.

El principal objetivo del nuevo modelo de negocio de la inmobiliaria es "revertir" su actual situación. A cierre del primer trimestre del año, Metrovacesa registró una pérdida neta de 90,2 millones de euros, fundamentalmente por provisiones y pérdidas registradas en ventas de activos.

Su deuda financiera neta ascendía a 6.130 millones de euros a cierre de marzo, cuando la compañía tenía en cartera once proyectos (cinco complejos de oficinas, dos centros comerciales, dos hoteles y dos aparcamientos).

Durante su intervención en la junta, Nafría garantizó que Metrovacesa cuenta con las bases necesarias para afrontar la "difícil" coyuntura actual. "El futuro viene marcado por la austeridad y por una gestión más ajustada. Sólo así responderemos a las necesidades del mercado", aseguró.

Para el nuevo presidente, entre las "fortalezas" de la inmobiliaria figuran "una singular estructura de negocio sustentado en un importante negocio patrimonialista", el nuevo accionariado, "márgenes de ingresos superiores a la media del mercado", una "prestigiosa" marca y un "excelente equipo profesional".

SUELDO DEL CONSEJO LIGADO A IPC.

La asamblea de Metrovacesa, en la que no intervino ningún accionista, aprobó, en el marco de la referida política de contención de costes, el punto del orden del día referido a la remuneración del consejo.

En virtud de este acuerdo, la empresa modificará sus estatutos sociales para vincular al Índice de Precios de Consumo (IPC) la actualización de la retribución de su consejo de administración, que para 2009 quedará fijada en un total millón de euros para el conjunto de sus once miembros.

Este importe se destinará a la remuneración por el puesto de consejero, y no incluye la retribución que corresponda a los consejeros que cuenten con funciones ejecutivas.

La junta también aprobó el nombramiento de dos nuevos consejeros, que tendrán carácter independiente (Alberto Peña Pesqueira y de Gonzalo Alcubilla Povedano) y ratificó el nombramiento del presidente, Vitalino Nafría, y del consejero delegado, Eduardo Paraja, así como del resto de miembros del consejo de administración nombrado por los bancos que controlan su capital.