Repartamos las responsabilidades

¿Quién es culpable del desastre chipriota? ¿Los propios dirigentes chipriotas que no han sabido gestionar y administrar sus recursos, o las entidades financieras que aportaban más y más financiación a las chipriotas cuando se sabía que no podían pagar ni los intereses de esa deuda? Igual que el caso griego. La solvencia de las entidades financieras chipriotas está muy influenciada por la liquidez de los mercados financieros al igual que las del resto del mundo y, si ésta se corta o tiene problemas en casos de crisis,  el sistema se cae a pedazo., Y para recomponerlo lo único tangible donde echar mano son los ahorros de los ciudadanos, así de sencillo y de inmoral.


Para recomponer la situación, que corría peligro desde hace mucho tiempo,  no podemos cortar en seco la financiación y abordar la solución del problema como un pirata. Tan responsable es el BCE como los propios gestores chipriotas. Los unos por seguir dando cuerda a la cometa sabiendo que en algún momento podría soltarse y los propios gestores chipriotas por no atreverse abordar medidas para solucionar el problema mucho antes de que  afectara a todos.

Hay un dicho que dice que si debes poco dinero al banco y no pagas, tienes un problema. Pero si debes millones, el problema lo tiene el banco.  La credibilidad de los organismos financieros internacionales queda mucho en entredicho cuando, en función de criterios “ varios",  casi siempre políticos y de influencia , hinchan las arcas de los bancos nacionales de un país, sin tener en cuenta que la gestión deja mucho que desear para poder devolver ese dinero. Negociar siempre requiere ser franco, abierto y creíble y esos términos no se encuentran fácilmente en muchas de esas negociaciones. Dar dinero a sabiendas que n ose puede devolver, no es ético ni responsable y esa ausencia de criterios reales es la que ha primado hasta ahora.

¿Cómo pueden pagar los ahorradores chipriotas ahora la factura? Es normal que se rebelen. Son ahorros de esfuerzo, de trabajo y sacrificios y ahora no pueden pagar los más débiles de la cadena. ¿Se debería exigir un control más exhaustivo del destino de la financiación? ¿Dónde está la supervisión bancaria a todos los niveles que prevenga conflictos como los que no parar de aflorar? Es necesario que se habiliten mecanismos como el fondo europeo de garantía de depósitos igual para todos, una supervisión única que obedezca a unas reglas comunes para todos que traten de evitar estas crisis que no favorecen a nadie y perjudican a los ciudadanos d a pie mas débiles.

La jaula de hierro del consumo que exige el aumento de la productividad para expandir el la producción,  como dice TIM JACKSON, es un tremendo error que nos conduce a la era de la irresponsabilidad colectiva. La desigualdad alimenta este consumismo desproporcionado, y no siempre se puede crecer a costa de todo . Este elemento se retroalimenta o recalienta, como queramos decir continuamente en económicas. Esta ceguera consciente de la que hemos hablado anteriormente nos lleva a permitir paraísos fiscales dentro de una zona regulada, nos lleva a permitir sobredimensionar nuestras necesidades a base de créditos que hipotecan nuestro futuro como país y esto es muy peligroso de cara al futuro.

Rafael Montava Molina
Consultor Financiero Empresarial
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