Los números rojos presiden hoy la renta variable en Estados Unidos. Y es que los datos macroeconómicos no hacen más que enturbiar el ánimo de los inversores. Así lo ha hecho el aumento en 12.000 de las solicitudes de beneficios por desempleo, pero también el aumento por tercer mes consecutivo del déficit de cuenta corriente –hasta 109.000 millones-. Cumpliendo las previsiones, el IPC del mes de mayo registró una caída del 0,2% mientras la inflación subyacente subió un 0,1%.

Hasta aquí las referencias macroeconómicas pero en el ámbito empresarial sin que sea ya novedad BP vuelve a ser el foco de atención. La compañía que suma un 1,72% a su cotización, se ha comprometido a aportar 20.000 millones de dólares para pagar a los afectados por el vertido de petróleo en el Golfo de México. Entre el resto de compañías ligadas al sector petrolero,
Chevron cede un 0,30%, Exxon Mobile cae un 0,21% mientras ConocoPhillips consigue rebotar un 0,24%.

Entre el sector financiero, Bank of America suma un 0,69%, JP Morgan se deja un 0,86%, Citigorup avanza un 0,88% mientras Morgan Stanley pierde un 0,54%, Wells Fargo se deja un 0,18%.

Entre las compañías protagonistas se sitúa Smithfield, dueña de Campofrío, perdió 4,6 millones de dólares en su cuarto trimestre fiscal, frente a las pérdidas de 81,2 millones del mismo periodo del año anterior. Sus ingresos repuntaron un 2,1% hasta los 2.910 millones de dólares o 18 centavos por acción. Ante este escenario, la compañía se deja más de 3%.