La prima de riesgo vuelve a niveles preCovid-19

El 20 de julio de 2012 la prima de riesgo española llegaba a tocar los 612 puntos básicos y el bono de referencia, el 10 años, se pagaba en el mercado a una rentabilidad del 7,28%. Ocho años nos separan del rescate a la banca y de las medidas de recortes del gobierno pero eso nos recuerda que cuando se complican las cosas, el tensionamiento de la deuda  soberana no es cosa de broma.

Desde el comienzo de la pandemia y ante la complicada situación española, el diferencial que se paga entre la deuda alemana y la española empezó a crecer como la espuma. Los problemas derivados del estado de alarma y del confinamiento nos llevaron a los 146 puntos básicos, con un 10 años español en 124 pb y  -22pb para el alemán. Y el culmen llegaba en abril: 155 pb con un bono patrio más barato, 113 pb, pero con el germano en modo refugio de máxima expresión en -42pb. 

Pero lo cierto es que, aunque en modo montaña rusa, la prima de riesgo española se ha corregido más de 7% en esos últimos tres meses, más de un 41% en el último mes y sólo en la semana precedente, un 17,5% hasta esos niveles de 83,90 en los que ha cerrado la primera semana de junio y un bono español en 56pb.

Una preocupación no sólo de nuestro país, sino globalmente europea que ha cambiado su panorama básicamente porque los dirigentes europeos se han puesto de acuerdo. Aunque hay diferencias sobre la mutualización de la deuda y la condicionalidad de las ayudas para quien haya de pedirlas, lo cierto es que la Eurozona se ha dado cuenta de que por ese camino nos estrellábamos todos.

Habrá que convivir con las reticencias holandesas, austriacas y en algunos momentos también las alemanas, e incluso con las inconvenientes palabras de Christine Lagarde afirmando que el BCE no está para reducir primas de riesgo. Pero los hechos mandan. La primera señal, el acuerdo franco alemán con el medio billón bajo el brazo sellado por Merkel y Macrón y después el helicóptero que parece que el exFED Ben Bernanke le ha prestado a Madame Lagarde con esos 600.000 milllones de euros adicionales, 1,35 billones en total para la compra de deuda que han hecho el resto: lograr niveles por debajo de los 84 puntos básicos en el caso español. Y moderación en el resto, aunque Italia y Grecia siguen muy tensionadas todavía.

Todos apuestan porque esta situación continuará. Goldman Sachs ya lo anticipaba antes del acuerdo entre los dos motores europeos, al igual que Julius Baer, quien considera que el fondo comunitario será un respaldo para la deuda periférica, la más castigada. También Morgan Stanley tras la actuación del BCE y apostar por los bancos que tendrán más y mejor financiación. Ahora solo queda que la prima llegue a los niveles de principios de año: 65,3 puntos básicos.

Además de financiarnos más barato la compra de deuda está garantizada. Así lo cree UBS, quien considera que buena parte la comprará este año, en el caso de España, el Banco Central Europeo con su super programa de compra de bonos: de momento ya ha adquirido 59.757 millones en deuda de nuestro país, el 25,5% del total adquirido hasta la fecha.