"La inversión extranjera directa (IED) dirigida hacia los activos productivos puede impulsar el crecimiento económico y reducir la pobreza", dijo Izumi Kobayashi, el vicepresidente ejecutivo de MIGA, en un comunicado del organismo internacional. Kobayashi celebró la noticia al compararla con la del año pasado, cuando la inversión extranjera directa se desplomó un 40 por ciento.