La comisaria de Justicia, Viviane Reding, asegura, a través de un comunicado, que 'las empresas necesitan una solución sencilla: una orden de embargo de cuentas efectiva en toda Europa que asegure el bloqueo de los fondos hasta que un tribunal haya dictado resolución sobre su restitución. En la difícil coyuntura económica que atravesamos, las empresas reclaman respuestas rápidas. Cada euro cuenta, sobre todo para las pequeñas empresas'.

En la actualidad, las dificultades jurídicas para reclamar el pago provocan que se cancelen en la UE deudas por valor de 600 millones de euros al año, según Bruselas.

Las empresas pierden alrededor de un 2,6 % de su volumen de negocios anual a causa de las deudas incobrables. 'Es ésta una deficiencia de nuestro mercado único que debemos subsanar rápida y enérgicamente', ha asegurado la comisaria comunitaria.