De este modo, las ventas de Johnson & Johnson disminuyeron en sus principales divisiones de negocio, puesto que la unidad de consumo facturó un 8,7% menos, mientras que la división farmacéutica vendió un 10,1% menos y la unidad de dispositivos médicos y diagnósticos facturó un 2,9% menos.

Asimismo, la cifra de negocio del grupo en EEUU sufrió un retroceso del 5%, mientras que a nivel internacional disminuyó un 9,6%, lastrada especialmente por el retroceso del 14,8% registrado en Europa, mientras que en la región Asia Pacífico subió un 3,6%.


"Pese a las dificultades económicas y las presiones a corto plazo, continuamos registrando unos sólidos resultados financieros", dijo William C. Weldon, presidente y consejero delegado de Johnson & Johnson, quien apuntó que la compañía realizará inversiones estratégicas de cara a introducir nuevos productos en los mercados y posicionar a la empresa para registrar un crecimiento a largo plazo.