Tal y como dice este gestor, la reacción del mercado a los últimos acontecimientos confirma que “se ha instalado un mayor relativismo en los agentes del mercado. Hemos pasado de atizar y luego preguntar a esperar y ver cuáles son las consecuencias de dichos eventos”. En este movimiento pendular que caracteriza a los mercados, “hemos dejado atrás el pesimismo y el escepticismo absolutos en los que hemos estado instalados demasiado tiempo”. Ahora, dice, el relativismo es mayor sin que en ningún caso se pueda hablar de complacencia. Un buen ejemplo de ello es la crisis italiana y el cambio en España. Eventos que, en clave de inversión, hacen un balance positivo y los mercados han sido  claros: a otro perro con ese hueso.

Otra de las dudas que sobrevuela actualmente a los índices es el momento del ciclo en que nos encontramos. “Con los datos en la mano, no hay síntomas de sobrecalentamiento de la economía. La mejor forma de entender en qué punto nos encontramos es la evolución del crédito, que crece al 5% en Estados Unidos, el mismo ritmo al que crece el PIB nominal”.  Por lo que ni siquiera EEUU tiene síntomas de sobrecalentamiento. En España el ciclo está en sus primeras fases: 2018 va a ser el primer año en que el stock de créditos crezca tras diez años en contracción y el PIB nominal estará cerca del 5% (por cuarto año en positivo). Con lo que sí, la economía española se encuentra en la primera parte del partido.

En cuanto a la evolución de la cartera, el fondo ha perdido un 0,51% frente al mercado. Este experto reconoce que la ola de actividad corporativa está llegando a la cartera del fondo. “En los últimos días, dos de las compañías incluidas en ella han recibido ofertas públicas de compra (OPA): Europac y NH Hoteles . Creo que ambas son un muy buen ejemplo de la filosofía de gestión del fondo. Las dos llevan en la cartera bastante tiempo y se incorporaron a la misma cuando estaban olvidadas, completamente fuera de los radares de los inversores internacionales”. En poco más de cuatro años que lleva Europac en cartera, el precio de la acción se ha multiplicado por casi cinco veces. Y en los más de dos que lleva la hotelera, su precio ha doblado.