Por ahora, sólo está comprometido un 50%, el que cubriría la propia SAS -20%- y Turismo de Barcelona y Catalana d'Iniciatives -cerca del 30%-, y todo ello condicionado a conseguir nuevos socios que cubran el 50% restante. Para ello, los promotores de la operación están sondeando a Lufthansa, el gran grupo aéreo alemán, pero también han contactado con empresarios catalanes vinculados a la asociación FemCat para que asuman al menos un 5% de la operación.

FemCat, presidida por Joaquim Boixareu, consejero delegado de Irestal Group, integra a empresarios como Albert Esteve (Esteve), Ramon Roca (Ros Roca) o José Miarnau (Comsa), la familia Sumarroca, la constructora Copcisa o los laboratorios Uriach.

FemCat ya intentó hace un año crear un fondo de capital riesgo para proyectos industriales pero no pudo cerrarlo por el difícil momento financiero, y siempre ha mostrado abierta a operaciones que puedan resultar estratégicas para Cataluña. También se quiere implicar como inversor en Spanair a la Cámara de Comercio de Mallorca para que entre con un paquete que podría rondar el 15%.

Antes del pasado fin de año, Catalana d'Iniciatives anunció en un comunicado que el vicepresidente de la firma, Rafael Suñol, asumía las funciones de coordinación en el proceso previo a la compra de Spanair a las líneas aéreas escandinavas SAS, que se prolongará hasta el próximo 31 de enero, con lo que apenas queda un mes para cerrar la operación.

La cuota de mercado en el aeropuerto de El Prat de Star Alliance, es del 20,8%, de la que el 13% corresponde a Spanair; y en el reparto de la T-Sur Spanair y socios de Star Alliance se quedaron el 21% del espacio disponible, siendo la segunda alianza aérea más beneficiada después de Oneworld, que lideran Iberia y British Air.