Iberpapel se ha visto- y se ve- muy perjudicada por los efectos de la pandemia. Tanto es así, que por ejemplo ha tenido que demorar en algunos meses la apertura de las nuevas instalaciones de su planta de celulosa de Hernani por el estado de alarma. Y más porque sí ha retrasado el resto de inversiones que tenía previstas por el Covid-19.
Y las pérdidas, por este impacto, se han visto reflejadas en sus resultados: hasta septiembre la compañía ha presentado pérdidas del 93% nada menos, con un beneficio neto que apenas alcanza los 1,14 millones de euros, arrastrada por la reforma de su planta de Zikuñaga, como indicábamos con parada de 50 días en la misma y el efecto Covid-19.
Las ventas de papel hasta septiembre han bajado un 29% frente al año anterior y los ingresos por la venta de energía eléctrica han caído un 32% ante la menor producción y el descenso de los precios de venta. El importe neto de la cifra de negocios del grupo supera los 117,5 millones, un 29% menos con un Ebitda de10,24 millones y que también desciende un importante 64%.
Sin embargo factores como los primeros indicios de recuperación del precio de la celulosa o la mejora de la actividad a medio plazo, al ritmo de la vacunación contra el coronavirus, puede vigorizar a la compañía, que ve por ejemplo como el aumento de las ventas online y por tanto la mayor fabricación de cartón ha beneficiado su producción, a pesar de las cifras que conocemos del pasado año, claramente a la baja. Además ha mantenido su dividendo en los 0,20 euros por acción, con cargo a los resultados de 2020, que ha abonado el pasado 18 de diciembre con una rentabilidad que alcanza el 1,14%
En su gráfica de cotización observamos como progresivamente, el valor ha ido perdiendo posiciones desde sus máximos de agosto de 2018. De hecho en el pasado ejercicio, la crisis le afectó profundamente, con caídas anuales que superaron el 22%, en especial por el precio de la celulosa, que sin embargo ahora parece recuperarse.
Y aunque los avances acumulados desde principios de año son nimios, del 1,74%, lo cierto es que el valor no se desdibuja en su cotización, a pesar de que en el último mes el bagaje es negativo, con un recorte del 2%.Todavía con mucho camino ante la resistencia de los 25,80 euros por acción, aunque también se distancia de los soporte de los 15,33 euros por acción.
Según nuestros indicadores premium Iberpapel mantiene en negativo, con tendencia bajista, todos sus parámetros técnicos. De hecho, en la última revisión, pierde su único punto positivo y queda en cero, como el peor valor técnico del mercado frente a los 10 de puntuación total. Con tendencia a medio y largo plazo bajista, momento total lento y rápido negativo, volumen de negocio a medio y largo plazo decreciente y rango de amplitud creciente en ambas vertientes.
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