En el ejercicio 2019, Iberdrola ha alcanzado un ebitda récord de 10.104 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 8,1%, superando por primera vez la cifra de 10.000 millones de euros.

La compañía que lidera Ignacio Sánchez Galán logró estas cifras récord gracias a un año con grandes inversiones. Las inversiones brutas crecieron un 32% hasta 8.158 millones. De ellas, un 44% se destinaron a redes y un 41%, a renovables.

 

Iberdrola logra un beneficio récord de 3.406 millones en 2019 gracias a sus inversiones

 

Esto permitió al grupo eléctrico reforzar su potencia en todos sus mercados, con 5.500 nuevos megavatios (MW) instalados en 2019, multiplicando así por cinco la capacidad media anual instalada en los últimos ejercicios.

Además, en este entorno de grandes inversiones, la generación de flujos de caja de Iberdrola creció en 2019 un 10%, hasta los 8.060 millones de euros. Este incremento se vio también reflejado en la mejora de los ratios de solvencia financiera.

Desde un punto de vista operativo, destacan positivamente las mejoras de tarifas en Brasil, junto con las eficiencias logradas y el aumento de la demanda, el incremento de la producción eólica marina gracias a la contribución de Wikinger el año completo y el comienzo de operación de East Anglia, una mayor capacidad instalada renovable en todos los países y el buen comportamiento del negocio de Generación y Clientes en España y México.

Por el lado negativo, destaca la menor producción hidroeléctrica, así como una menor demanda y menores márgenes sobre determinadas tarifas de electricidad y gas en Reino Unido.

Para este año, gracias a unas inversiones récord superiores a 10.000 millones de euros, Iberdrola espera que su beneficio neto crezca a un ritmo un 'sólo dígito alto' (entorno al 8% o 9%), manteniendo la solidez financiera y la política de dividendos crecientes. Este ritmo de crecimiento se mantendrá en los ejercicios siguientes.

Aumenta el dividendo un 14% 

Los resultados obtenidos permiten a Iberdrola proponer a la próxima junta general de accionistas un aumento del 14% en la remuneración anual con cargo al ejercicio 2019, hasta los 0,40 euros brutos por acción, alcanzando con tres años de anticipación el suelo del dividendo fijado para 2022.

De este modo, a los 0,167 euros brutos por acción abonados en febrero como dividendo a cuenta, se le unirá el dividendo complementario de 0,232 euros brutos por acción, una vez aprobado en la junta general de accionistas (a pagar en julio 2020), hasta completar los mencionados 0,40 euros brutos por acción.

Ibedrola destaca que los más de 600.000 accionistas del grupo se han beneficiado de una revalorización de la acción y de los dividendos pagados por la compañía en el año del 37%, además de un incremento del dividendo en cinco años superior al 47%.