IAG: potencial del 30% tras quedarse rezagado respecto a otros valores turísticos

Las acciones de IAG (Iberia) suben un 1,44% a media mañana hasta alcanzar los 1,58 euros dentro de un IBEX 35 que a la misma hora avanza un 0,92%. Es el segundo día consecutivo en verde para el valor, que acumula una revalorización de un 14% en lo que va de año, con la capitalización bursátil al borde de los 7.900 millones de euros. 

A pesar de este comportamiento positivo, lo cierto es que el holding de aerolíneas se ha quedado algo rezagado respecto a otros valores del sector turístico, que lideran los avances en el acumulado del año dentro del Ibex 35.

Los analistas le dan al valor un potencial de alrededor de un 30% a 12 meses. De acuerdo con los datos recopilados por Reuters, de media los analistas le dan al valor una recomendación de ‘comprar’ con un precio objetivo de 2,07 euros que está un 31% por encima de la cotización actual.

El holding que agrupa a Iberia, British Airways, Aer Lingus y Vueling ha vivido un tormento desde el inicio de la pandemia hace tres años. IAG llegó a situarse al borde de perder el euro por acción (1,008 euros el 2 de octubre de 2020) durante la segunda ola del covid-19 en España, registrando un rebote desde entonces de un 56%.

No obstante, el valor todavía tiene un trecho por delante más que considerable para recuperar los niveles anteriores a la pandemia. El 19 de febrero de 2020, un mes antes de que se declarase el estado de alarma en España, los títulos de la aerolínea llegaron a marcar 5,11 euros. Tomado este precio de referencia, todavía caen casi un 70%.

Ayer, el consejero delegado de IAG (Iberia) , Luis Gallego, avisó de que las frecuentes huelgas que afectan a Europa, en especial a los controladores aéreos franceses, tienen “un impacto enorme en la puntualidad de los vuelos”, por lo que considera que es necesario asegurar un sistema de arbitraje y un mayor preaviso.

Durante su intervención en las jornadas 'Wake Up Spain!', organizadas por 'El Español', avisó de que es importante proteger los sobrevuelos en determinadas zonas “o usar proveedores alternativos durante los periodos de huelga” porque la situación “es crítica”. Gallego explicó también que la guerra en Ucrania supone que haya menos espacio aéreo por el que volar. “Si volvemos a la misma capacidad que teníamos en 2019 dentro de Europa, pero no tenemos el mismo espacio aéreo y encima tenemos una situación de huelgas, podemos tener una situación de disrupción que todos queremos evitar”.

En esta materia, Gallego considera que podría ayudar la existencia del Cielo Único Europeo, pero reconoce no ser “muy optimista al respecto”. “Llevamos mucho tiempo intentando impulsarlo, pero no lo conseguimos”, lamentó, teniendo en cuenta que se trata de un sistema que permitiría reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2) del tráfico aéreo europeo hasta en un 10%, pero para poder conseguirlo es necesario que “todos los Estados miembros empujen”.