Grecia ha desmentido algunas informaciones en las que se apuntaba hacia un posible rescate valorado en 60.000 millones de euros con organismos internacionales. A pesar de ello sus costos de financiación han vuelto repuntar a tenor de una posible reestructuración de su deuda.
 
Las dudas surgieron tras valorar el mercado las palabras de una parlamentaria alemana que ha afirmado que Grecia no habría cumplido las condiciones para estar en disposición de recibir el siguiente tramo de la ayuda.
 
Sin embargo una fuente cercana a los inspectores de la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional dijo que era demasiado pronto para una decisión.