El interés por parte de los inversores ha hecho disparar la demanda de dichas acciones, lo que ha permitido a GM aumentar el precio de compra de las mismas. En la actualidad, el 60% de la compañía está en manos del gobierno
de EEUU, quien está deseoso de deshacerse de dicha participación tan pronto como sea posible, y que dichas acciones
vuelvan al mercado.

La compañía planea vender 365 millones de acciones a un precio de 33 dólares, lo que supone un 18% más del precio previsto inicialmente. Además prevé ofrecer 4,000 millones en acciones preferentes, lo que supone multiplicar por cuatro el valor inicial previsto. Según Reuters, un precio de 33 dólares por acción proporcionaría a GM un valor de mercado de 63,000 millones de dólares, cifra muy cercana a los 66,000 millones que la empresa necesita devolver a los contribuyentes que la salvaron de la quiebra en su momento.

A comienzos de este mes, y gracias al incremento de las ventas tanto en EEUU como en el exterior, la compañía publicó unos beneficios netos de 2,000 millones de dólares durante el tercer trimestre del año.

El gobierno de EEUU tomó control de GM durante el mes de julio de 2009, como parte del rescate de la compañía que se acogió a la ley de quiebras estadounidenses.


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