Pese a la caída del beneficio, que se vio afectado principalmente por la evolución del negocio europeo, el resultado superó las previsiones de Wall Street.

Por acción, el beneficio alcanzó 1,03 dólares, cuando la media de los analistas lo situaba en 96 centavos, según un comunicado de la compañía.

El volumen de negocios aumentó un 7%, hasta los 36.700 millones de dólares, en línea con las estimaciones de los analistas.