El Gobierno luso anunció hoy que obligará a la petrolera Galp a que informe sobre la estructura de costes y beneficios de la actividad de almacenamiento y transporte de combustibles líquidos, datos hasta ahora confidenciales.En su comparecencia ante la comisión parlamentaria de Asuntos Económicos, el ministro luso de Economía, Manuel Pinho, dijo que
es "importante que el mercado tenga acceso libre" a esta información y que los precios de almacenamiento y transporte sean "justificados".Esta es una de las medidas anunciadas por el ministro después de que la Autoridad de la Competencia (AdC) lusa presentase hoy un estudio sobre el mercado de los combustibles en Portugal, que señala que no han encontrado "comportamientos ilícitos" en el establecimiento del precio de gasolina y gasóleo.A pesar de tomar esta decisión, Pinho rechazó la posibilidad de retirar a Galp la gestión de las infraestructuras de almacenamiento y transporte de los combustibles del país, controladas casi en su totalidad por el antiguo monopolio luso.

