El pasado no fue un año fácil para los mercados bursátiles. Y, a juzgar por el arranque de este 2021, la tónica de la volatilidad no desaparecerá hasta que empiece a hacerlo el Covid-19. No obstante, las dificultades no han sido ni están siendo las mismas ni para todos los sectores ni para todas las compañías. 

Fluidra es un claro ejemplo de resistencia a las adversidades, a pesar de lo gris del temporal. La empresa de piscinas y wellness despedía 2021 con un acumulado de doble dígito en su cotización: en concreto, de casi un 72%. 

Este 2021 los títulos de la empresa presidida por Eloi Planes también se encuentran en verde y en estos momentos en subida libre. Las acciones de Fluidra marcaban un nuevo máximo el pasado 14 de enero, cuando cerraban en 21,45 euros, una cifra que la compañía ha superado con 21,50 euros (18 de enero), 21,75 euros (5 febrero) y 22 euros (8 de febrero).

Hoy, la empresa vuelve a superarse a sí misma en el mercado. Fluidra ha superado sus resistencias a medio y largo plazo, situadas en los 22,1 euros, y ha llegado a tocar en intradía los 22,20 euros, toda un señal de fortaleza que mantendrá mientras no pierda el nivel de los 20-21 euros.

Con estos datos, son muchos los que ven a Fluidra en el selectivo más pronto que tarde. A la espera de que en marzo se vuelva a reunir el Comité Técnico del Ibex, la compañía se pone las pilas para poder entrar de forma merecida a formar parte de la bolsa con palabras mayores. Y lo hace una vez que su presidente, como comentaba estos días Eloi Planes, quiera elevar la liquidez del grupo para cumplir con los requerimientos que se necesitan para entrar, después de que en diciembre haya soplado 13 velas de su cumpleaños bursátil. Su capitalización además, que supera los 4.333 millones de euros, es otro de sus avales.

Según nuestros indicadores técnicos premium, Fluidra obtiene una de las mejoras notas del mercado continuo con un 9 sobre 10 puntos posibles, con tendencia alcista tanto a medio como a largo plazo, momento total lento y rápido positivo, y volumen creciente a medio y largo plazo. Solo en negativo la volatilidad del valor, que permanece creciente.