El presidente de Repsol, Antonio Brufau, ha declarado que la compañía española lleva a cabo con Rusia "intensas negociaciones", que se encuentran ya en "un nivel avanzado", sobre la compra de una "considerable parte" en el proyecto Sajalín-3, que no precisó.Según otras fuentes, Repsol pretende hacerse en el proyecto, repartido ahora entre los gigantes estatales rusos Gazprom y Rosneft y la china Sinopec, con un 25% de acciones, cuyo precio Milchakova cifró en entre 1.700 y 2.000 millones de dólares.La analista consideró lógico que los españoles, que antes procuraban evitar trabajar con las compañías estatales rusas, cambiaran de estrategia, pues "todas las trasnacionales sufren una disminución de la extracción de crudo y gas", mientras que Rusia es uno de los pocos países donde ésta "todavía va en aumento".La experta explicó al diario Gazeta.ru que tal vez la única variante para Repsol de entrar en el proyecto podría ser a cambio del acceso de Gazprom a las redes de distribución españolas, pero subrayó el Gobierno socialista de España lo ha prohibido.Recordó que Gazprom ya intentó entrar en el mercado español mediante la compra de la compañía gasística Indeza, pero el Gobierno de Jose Luis Rodríguez Zapatero ha vetado en dos ocasiones la transacción dejando claro que no permitirá la presencia del monopolio ruso en España."Los españoles jamás nos venderán las redes de distribución de gas", enfatizó Milchakova, puesto que el Gobierno socialista ha endurecido la política energética de España y ha "condenado al ostracismo" tanto al Gazprom ruso como a la argelina Sonatrach.Según la analista, el verdadero problema de Sajalín-3 no será el pulso de las compañías rusas con las extranjeras, sino la lucha entre los dos gigantes rusos por el control de este yacimiento, con las mayores reservas rusas de petróleo y gas en el Pacífico.Sajalín-3 incluye cuatro bloques en el mar de Ojotsk, al noroeste de la isla rusa del mismo nombre, con unas reservas comprobadas que ascienden a 854 millones de toneladas de petróleo y 940.000 millones de metros cúbicos de gas.La petrolera estatal rusa intentó con este pretexto hacerse también con la licencia del vecino yacimiento Kirin, el mayor de los cuatro, pues alberga 687 millones de toneladas de petróleo y 873.000 millones de metros cúbicos de gas natural.Dado que las reservas de gas y crudo en Sajalín-3 se distribuyen en partes iguales, el presidente de la petrolera Rosneft, Serguéi Bogdánchikov, propuso al gigante gasístico la prospección conjunta de todos los bloques, pero Gazprom, que tiene una división de petróleo propia, por ahora no lo ha aceptado.En otros sectores de la plataforma marítima rusa, la ExxonMobil estadounidense, la nipona Sodeco y la petrolera nacional india ONGC operan el proyecto Sajalín-1, mientras el grupo anglo-holandés Royal Dutch/Shell, las niponas Mitsui y Mitsubishi y Gazprom llevan a cabo el Sajalín-2.