El mayor fabricante mundial de equipo de telefonía móvil registró un beneficio en el cuarto trimestre por debajo de las expectativas del mercado.

En concreto, tuvo unas ganancias netas de 4.320 millones de coronas suecas (unos 658 millones de dólares) entre octubre y diciembre, por encima de los 314 millones de coronas que ganó en el mismo periodo del año anterior. De media, los analistas habían previsto un beneficio de 4.840 millones de coronas.

En cuanto a las ventas, éstas se incrementaron el 8% hasta alcanzar los 62.780 millones de coronas. Según informó Ericsson, el problema de la escasez de componentes se ha "normalizado".