El organismo dependiente del Ministerio de Economía retoma las subastas de deuda después de dos semanas de parón con la tensión del mercado en máximos. Además, las dudas y la presión sobre España permanecen, lo que le ha empujado a subastar solo 2.000 millones, una cantidad inferior a lo que habitualmente emite.

En concreto, el Tesoro subastará el papel a más largo plazo que ofrece al mercado (obligaciones con cupón del 5,85% y vencimiento a 31 de enero de 2022), bonos con cupón 3,30% y vencimiento a 31 de octubre de 2014 y bonos con cupón 4,25% y vencimiento a 31 de octubre de 2016.

A pesar de la prudencia del Tesoro, las tensiones siguen y pueden obligar al organismo a elevar considerablemente el interés para cerrar con éxito la emisión, aunque la prima de riesgo ha logrado dejar atrás este miércoles el umbral psicológico de los 500 puntos básicos.


La rentabilidad del bono español a 10 años se sitúa hoy en el 6,26% y la prima de riesgo en los 495 puntos básicos.