El Ibex 35 se sitúa por encima de los 10.400 puntos. La última vez que estuvo en el plató de Estrategias de Inversión fue muy pesimista con el selectivo español. ¿Sigue pensando que la lateralidad va a seguir al menos hasta mitad de 2018?

Bueno más que pesimista, dije que el mercado va seguir lateralizado entre los 9.800 puntos y los 10.700 puntos. Sigo pensando lo mismo, con un Inditex con dudas que adelanta las rebajas al principio de enero, que es algo significativo porque la campaña no le está yendo muy boyante, los dos trimestres anteriores con ralentización y unos múltiplos muy altos… lo que hace que cueste verlo tirar del índice. Telefónica que sigue sin tener alegría en la parte alta de la cuenta de resultados, no se ven mejoras en ingresos que les sirvan de catalizador y las desinversiones están completamente paradas. Todo el sector eléctrico con dudas regulatorias a partir de 2020, aunque queda mucho y parece que el ministro se ha retractado un poco de sus palabras y eso lateraliza el sector eléctrico…

La esperanza está puesta en la banca, que es un sector que podría mover al índice al alza, pero para que eso pase tenemos que ver una mejora en el tramo largo de la curva de bonos, hay expectativas, pero a día de hoy es más un deseo que una realidad. Es probable que en el inicio de año nos vayamos a esos 10.700 puntos, pero aún va a costar mucho que veamos roturas de esos niveles. En este momento yo centraría mi universo de inversión en empresas de pequeña y mediana capitalización, el Ibex Small Cap está rompiendo máximos, por lo que no hay porque centrar la cartera en Telefónica e Inditex.

¿Cómo ve el rechazo de NH a la propuesta de Barceló? ¿Cree que es mejorable la oferta?

El aspecto positivo es que hay una oferta sobre la mes, con un precio superior al que cotizaba NH con ecuación de canje para fusionar ambos grupos. Que haya rechazado de pleno y que no haya lanzado un mensaje de estamos abiertos a otras ofertas o este precio no pero uno superior podría encajar… pues bueno, quizá haya sido un jarro de agua fria, pero la cotización de NH tampoco ha sufrido mucho por lo que te deja entrever que hay interés en la compañía. Hay lío accionarial en NH, luchas internas por el control del consejo... está HNA por un lado y otros grupos dentro del consejo, por lo que no hay un control total de la gobernanza de la compañía. Esos líos normalmente siempre acaban bien para el accionista porque al final siempre hay alguien que da un aldabonazo encima de la mesa. Si hay corrección por este rechazo será más para subirnos a NH que para ponernos nerviosos. A nivel operativo va muy bien, vive un momento dulce a nivel de resultados, creo que hay que salir largo en NH en esos 5 euros sin operación corporativa y en los 6-7 euros si se produce.

Repsol está beneficiándose de las subidas del petróleo y está protagonizando las subidas de este arranque de año en el Ibex. ¿Le gusta la petrolera española?

A 12 euros me gusta, a 16 euros me va gustando menos. Lo están haciendo bien, hicieron muy mal en cuanto al momento de la compra de la petrolera canadiense Talisman, seguramente si se hubieran esperado seis meses pues les habría ido mejor y hubieran pagado unos múltiplos más ajustados. Pero desde ese error de timing el resto de movimientos que ha ido haciendo Repsol han estado muy bien. Desde la reducción del dividendo para no asfixiar al grupo, todo la desinversión que ha hecho y la reestructuración ha ido muy bien. Dentro del sector petrolero lo ha hecho muy bien, pero sigo manteniendo un escenario del petróleo en fase lateral entre los 40 y los 60 dólares. Por debajo de 40 dólares no les interesa a los países petroleros porque descuadra sus finanzas públicas pero por encima de los 60 dólares resulta barato técnicas como el fracking por lo que tampoco les interesa. Esos 40-60 dólares del petróleo suponen para la acción de Repsol estar entre los 13 euros y los 16-16,5 euros. Ahora hay una desinversión en Gas Natural que puede ser un catalizador para llevarnos un poco más en precio, pero debemos aprovecharlo para bajarnos y no para emocionarnos porque un crudo en 60 dólares no deja excesivo potencial a las petroleras. No soy especialmente optimista con el sector petrolero en los próximos dos años.

OHL anunció esta misma semana un dividendo extraordinario a sus accionistas. ¿Cree que su plan de saneamiento ha sido uno de los grandes hitos del pasado año de la bolsa española?

Al final ha sido un desmantelamiento de OHL. Era una compañía en la que Villar Mir nos tenía acostumbrados a ir al límite, siempre ha tenido un problema de gobierno corporativo porque se gestionaba como si fuese una no cotizada, a golpe de decisión del consejo, pegando bandazos y muy al límite del endeudamiento, con operaciones de entrada y salida muy rápidas… con movimientos dentro del holding del Grupo Villar Mir. Al final hubo un descarrilamiento por temas de circulante, con un elevado nivel de deuda y al final por lo que ha optado el Grupo Villar Mir es por una liquidación de la compañía porque vender Concesiones que era la principal línea de negocio, que se ha vendido muy bien, pero al final has desmantelado OHL. En definitiva, a parte de hoteles y complejos es reducida, y la parte de construcción e ingeniería no es un negocio muy rentable, pese al volumen de facturación. Queda un OHL muy en liquidación, que tiene sentido para el Grupo Villar Mir pero te deja sin interés comercial a la compañía como cotizada. Creo que vale más de los 5 euros en los que cotiza, estaría en 5,9 o 6 euros, que creo que llegará este año y cuando los toque me olvidaría de OHL para un tiempo largo.

En una situación similar se encuentra Duro Felguera, que está disparada en el continuo. ¿Ve solución para la compañía asturiana?

Parece que Banco Santander está tomando las riendas y liderando ese plan de viabilidad. Lo que ocurre normalmente en estos proceso es que suele darse una reacción positiva cuando empieza a verse algo de viabilidad de una compañía que ha estado cerca del colapso. Luego suele entrar en una fase de letargo porque va a haber una toma de control brutal de los acreedores y bonistas para hacerse con las acciones y una fuerte dilución de los accionistas antiguos para reflotar el grupo y desapancarlo y en dos o tres año un reflote del grupo… porque sus mayores interesados en que esto ocurra son sus acreedores. Después de este rebote no creo que sea el momento de subirnos al carro, por lo que sería cauto a corto plazo.