Los funcionarios del Fondo Monetario Internacional consideran que las repercusiones de una consolidación fiscal y gradual de Estados Unidos "son limitadas" y recomendaron al gobierno iniciar un ajuste fiscal en el ejercicio 2012 para evitar el riesgo de una pérdida perjudicial de credibilidad.

En el mismo, se determina que "los riesgos de una pérdida de confianza en la deuda de EEUU son universalmente grandes y negativos". Así, los economistas del FMI Los hicieron hincapié en "la necesidad de elevar sin demora el techo de la deuda federal y de forjar un acuerdo en torno a las características específicas de un plan integral de consolidación a medio plazo". Desde su punto de vista, "una vez que se cuente con un marco plurianual creíble y bien definido, el ritmo de reducción del déficit a corto plazo podría adaptarse en mayor medida a la situación cíclica".

Además, los directores de la misión del FMI a EEUU señalaron que es necesario "desplegar nuevos esfuerzos para resolver los problemas en los mercados inmobiliarios y de trabajo". La aplicación de medidas para mitigar las ventas en situaciones problemáticas y facilitar la modificación de los préstamos ayudaría a estabilizar los precios de la vivienda, acelerando al mismo tiempo la reforma de las empresas hipotecarias semipúblicas.