Los bajos niveles de liquidez se han añadido a la rapidez de los movimientos, lo que ha cogido al mercado por sorpresa.Merrill Lynch estima que el parón económico global será mucho más modesto de lo que el mercado supuestamente espera. Por añadidura, considera que la inflación supone un "auténtico problema" y los tipos reales continúan siendo negativos de forma predominante, sugiriendo que las tensiones inflacionistas continuarán.