El Juzgado de lo Mercantil número 2 de Pontevedra ha acordado declarar la firmeza del auto que en el que no admitía a trámite la solicitud de concurso de acreedores de Clesa
, propiedad de Nueva Rumasa, por falta de competencia territorial y en el que decidía remitir el procedimiento a los juzgados de lo mercantil de Madrid. En una diligencia de ordenación, el juzgado gallego adopta esta decisión tras notificar el auto del 1 de abril y después de recibir un escrito de la parte concursada manifestando su deseo de no recurrir y solicitando que se remitan las actuaciones a Madrid.