El consejo del BCE se reúne cada semana para decidir el límite de las compras de bonos para controlar la subida del rendimiento de la deuda soberana. El límite se considera en círculos de la banca central "un secreto" porque se teme que podría incentivar las especulaciones.

El FAZ asegura que ayer hubo una reunión para rebajar este nivel, y que cada vez más miembros, como Holanda y Austria, se muestran escépticos sobre el programa.

Mientras, las críticas a la compra de bonos incluyen a los alemanes Jens Weidmann y Juergen Stark y al gobernador del Banco de Luxemburgo, Yves Mersch.

La semana pasada, el BCE compró 4.478 millones de euros, la mitad que en la anterior, cuando adquirió 9.520 millones. El récord lo marcó a mediados de agosto, cuando adquirió 22.000 millones en pleno recrudecimiento de la crisis de deuda soberana.