Desde su lanzamiento en 1.999 (los datos anteriores conforman el histórico sintético proporcionado por el cambio DEM/USD), en el entorno de los 1.14, el Euro no paró de perder valor contra el Dólar, tocando fondo en Octubre del año 2000 al cambiarse un poco por encima de los 0.82. En ese momento, perdía un 28% de valor con respecto al cambio inicial de lanzamiento. Pero todo estaba a punto de cambiar.

Desde ese mínimo en los 0.82, la moneda única inició un ascenso imparable a la vez que vertical, entre los años 2.002 y 2.003 (cuando se rompió la paridad de nuevo a favor del Euro). En el gráfico, podíamos ya dibujar el canal alcista principal (formado entre Junio de 2.001 y Febrero de 2.002), y hasta 2 líneas de prolongación de dicho canal. Para que nos entendamos, una línea de proyección del canal (3 líneas) se considera aún un rango normal; llegar a una cuarta línea se considera un movimiento exrtemo; y pasarla es un movimiento claro de aberración, que, por norma, trae consigo un movimeinto de reacción igualmente extremo o muy fuerte.

A nivel técnico, el momento de inicio de ‘hostilidades’ empieza en 2.004, cuando por primera vez el Euro sale del rango de 4 líneas, acto que repetiría en 2.005, produciéndose a su vez, movimientos de reacción que incrementaron la volatilidad del par enormemente, y lo colocaron como el instrumento financiero más operado. Pero aún no estaba todo dicho. El período de aberración extrema lelgaría entre el 2.007 y el 2.008, donde el Euro se fue de toda racionalidad en una sola dirección ascendente, tocando los 1.60 en verano de 2.008, y haciendo creer –a quién se lo quisiera creer-, que había venido para quedarse y ser la nueva moneda de referencia. Lo que faltaba por ver era el movimiento de reacción anti-irracionalidad, en el que aún hoy en día estamos inmersos.


Gráfico Euro-dólar semanal


Como podemos ver, tras la caída del 2.008, volvimos a rebotar, ya en 2.009 hasta salir fuera de los límites de nuevo y tocar los 1.51, momento en el que el peso de la gravedad volvió a hacer efecto y ha puesto al par de nuevo dentro del canal alcista original, algo que no se consiguió con el desplome del 2.008 (¡Y que no se veía desde el 2.002!), lo que nos indica que el Euro ha perdido todo el gas que tenía, y que, como máximo, podría rebotar a la tercera línea de este rango, sobre 1.36-1.38, pero que tiene un destino bastante premeditado, y ese es el atacar la línea alcista original, que hoy encontramos en los 1.20, y que sería una sorpresa no ver este mismo año o principios del siguiente, tras el rebote comentado anteriormente. Ese es el escenario a medio-largo plazo con el que creo se debe trabajar, y que tiene altas probabilidades de hacerse realidad.