Además, el Banco Popular de China anunció en el mismo comunicado un descenso del coeficiente de caja de los bancos (porcentaje de las reservas que cada entidad financiera no puede reinvertir), con el fin de aumentar la liquidez en el sistema y promover el consumo.

El nuevo coeficiente de caja será del 15,5 por ciento, frente al 16,5 anterior, en los bancos de gran tamaño, y del 14,5 para los de pequeño y mediano. Los nuevos tipos entran en vigor mañana, jueves, y los nuevos coeficientes el próximo día 5.

La bajada de tipos ya se rumoreaba en los círculos económicos chinos desde hace unos días, lo que motivó ascensos en las maltrechas bolsas nacionales a finales de la semana pasada y, según los analistas, producirá también ganancias bursátiles al menos en la jornada de mañana, jueves.

La medida se produce, además, un día después de que el Banco Mundial anunciara su previsión de que China, afectada por la crisis mundial, crecerá en 2009 sólo un 7,5 por ciento, lo que sería su cifra más baja de crecimiento desde 1990.