El presidente del Santander, Emilio Botín, afirmó hoy durante la junta general de accionistas de la entidad que el Banco de España "debe tener plena capacidad para actuar sin interferencias políticas" en el proceso de reestructuración del sistema financiero español.

Botín apostaba así por que el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) que ultima el Gobierno y prevé trasladar al Parlamento, otorgue un papel decisivo al organismo que encabeza Miguel Ángel Fernández Ordóñez en caso de que sea necesario intervenir alguna entidad financiera.

Botín estimó que en este supuesto "sería deseable que se hiciera con anticipación, caso por caso, y mediante el correspondiente plan de reestructuración de la entidad que lo necesite, siendo el Banco de España el encargado de promover y titular estas medidas" para garantizar el menor coste para el erario público.

El presidente del Santander subrayó que el sistema financiero español ha resistido mejor que otros los efectos de la crisis, gracias en parte a la supervisión del instituto emisor español, y destacó que hasta ahora las necesidades de intervención pública -con el consiguiente efecto para el contribuyente- "han sido mínimas comparadas con las de otros países del entorno".

A su parecer, el Banco de España ha realizado una "excelente labor" para evitar que las entidades financieras asumieran riesgos excesivos o utilizaran en su gestión vehículos especiales de difícil control, a diferencia de las autoridades supervisoras de otros países, como la Reserva Federal estadounidense (Fed). "INSPECCIÓN FÍSICAMENTE PRESENTE".

Asimismo, Botín recordó que el organismo presidido por Fernández Ordóñez lleva a cabo una inspección "proactiva y físicamente presente en las entidades" financieras españolas, algo infrecuente en otros sistemas de supervisión, pero que "ha demostrado su utilidad".

La vicepresidenta segunda del Gobierno, Elena Salgado, afirmó el pasado lunes que ninguna entidad con capacidad de arrastrar a otras necesita ser rescatada en la actualidad, al tiempo que calificó de "inevitable" la reestructuración del sistema financiero a través de integraciones.

La ministra avanzó que el fondo de reordenación del sector financiero que ultima el Ejecutivo contempla que la intervención del Estado y el uso de recursos públicos sólo se producirá cuando sea la única opción, y se procederá a reestructuración profunda de la entidad en problemas.