El banco que preside Francisco González calificó de "excelente" este resultado, conseguido en un ejercicio "muy complejo", marcado por, segundo año consecutivo, por una "grave crisis" económica y financiero a nivel internacional.

La tasa de morosidad de BBVA se situó al finalizar 2009 en el 4,3%, dos puntos más que a cierre de 2008, con una cobertura del 57%, aunque si se incluye el valor de los colaterales asociados a los riesgos, ésta se eleva hasta el 165%.

La entidad destacó que "la potencia" de sus resultados le permitieron anticiparse y realizar saneamientos y provisiones de carácter extraordinario, que le sitúan en una posición diferencial para encarar el futuro y aprovechar oportunidades de crecimiento.

El banco precisó que en dichas dotaciones de anticipación se enmarcan 551 millones de euros destinados a prejubilaciones; 100 millones adicionales al estándar regulatorio a saneamientos de inmuebles, y otros 1.441 millones a saneamientos crediticios en España, Estados Unidos y México.