dividendo santander

Si esta tarde Banco Santander saltaba a la palestra por las buenas noticias de su "no a los despidos colectivos", las de esta noche no lo han sido tanto, al menos los accionistas...

Aunque en los últimos días empresas del Ibex 35 como Amadeus anunciaban su apuesta por cancelar su dividendo, ninguna entidad financiera lo ha hecho hasta hoy: Banco Santander ha sido la primera en dar el difícil paso esta noche.

La entidad del Ibex 35 ha comunicado a través de la CNMV que el consejo de administración ha decidido revisar su política de retribuciones al accionista, con el fin de disponer de todos los recursos que sean necesarios para apoyar a empresas y clientes particulares afectados por la pandemia del coronavirus.

En concreto, según explica la entidad en su comunicado "Banco Santander cumple holgadamente los requisitos de capital para mantener la política de dividendo (payout del 40-50%) y está cómodo con los colchones (buffers) que tiene respecto a los mínimos regulatorios exigidos", pero se ha comprometido a revisar el dividendo a pagar este año para disponer de más recursos ante las necesidades de sus clientes surgidas por el Covid-19.

Así, el consejo de Banco Santander ha decidido consolidar un único dividendo final, que se someterá a la aprobación de la junta general de accionistas en 2021 que determinará la cuantía final a pagar una vez que conozca el impacto que haya tenido la pandemia. Por lo tanto, en noviembre de 2020 no se efectuará pago de dividendo a cuenta.

 

Ana Botín reduce un 50% su retribución para la lucha 

Con el fin de apoyar el esfuerzo global que se está haciendo para combatir el coronavirus, Banco Santander ha creado un fondo para proporcionar equipamiento y materiales esenciales, que se financiará con la reducción en la retribución del consejo y la alta dirección del Grupo y con aportaciones voluntarias de los empleados del banco. Se espera que se constituya con un importe de al menos 25 millones de euros. Las aportaciones se destinarán a cubrir necesidades inmediatas, como la producción y adquisición de equipamiento médico, ropa de protección y otros equipos que son necesarios para tratar a los pacientes infectados por el virus, así como a efectuar donaciones a las autoridades e instituciones correspondientes.

Así, la presidenta de Banco Santander, Ana Botín, y el consejero delegado, José Antonio Álvarez, han decidido renunciar al 50% de su retribución (fija y variable) de 2020, mientras que la compensación de los consejeros no ejecutivos se reducirá un 20%. La Comisión de Retribuciones del Grupo y los órganos correspondientes en cada uno de los países propondrán trasladar este compromiso al resto delos equipos directivos en los mercados en los que opera Santander. "La política de bonus se revisará para asegurar que se destinan los mayores recursos posibles a ayudar a nuestros clientes", dice el banco.

“Para muchos de nosotros, la pandemia del coronavirus es el desafío más importante al que nos hemos enfrentado en nuestra vida. La magnitud de la tarea que tenemos por delante exige un enorme esfuerzo colectivo, en el que los gobiernos, los bancos centrales y otras autoridades, el sector privado, las organizaciones benéficas y las personas trabajemos juntos para limitar la propagación y proporcionar atención a los afectados, ya sea directa o indirectamente. Nos esperan meses complicados, pero confío en nuestra capacidad como sociedad para superarlo y el banco estará a la altura”, ha señalado la presidenta Ana Patricia Botín.

Banco Santander ya ha anunciado una serie de medidas para proteger y apoyar a sus empleados y clientes, entre ellas: líneas de liquidez de emergencia para pymes en dificultades; moratorias de pago en algunos mercados; o el cierre de sucursales para proteger a los empleados mientras se asegura la continuidad del servicio en toda la red comercial, además del compromiso anunciado esta tarde de mantener los 29.000 empleos directos de España.