BAA atribuye este descenso de la demanda a la actual situación económica.


En los diez primeros meses del año, el número de pasajeros creció un 4,2% en comparación con igual periodo del ejercicio precedente, hasta sumar 92,64 millones.


En octubre, el tráfico cae en todos los aeropuertos de la filial de Ferrovial, con la excepción de Edimburgo, el que grupo ha puesto en venta, que creció un 1,8%, el de Glasgow (+0,3%) y Aberdeen (+7,6%).