Según la normativa, ningún accionista de Enagás y Red Eléctrica, salvo la SEPI, puede poseer más del 5 por ciento del capital y sus derechos políticos están limitados al 3 por ciento de forma genérica y al 1 por ciento para las compañías que operan en los respectivos sectores.

"Tener un transportista y operador del sistema con su independencia garantizada a corto, medio y largo plazo es un elemento fundamental", explicó Atienza, que señaló que no tiene constancia de que vaya a haber cambios que "alteren o debiliten" esa independencia.

Añadió que el ministro de Industria, Miguel Sebastián, ha comentado que no hay prevista ninguna modificación del actual modelo, en el que tanto REE como Enagas actúan como transportistas y operadores del sistema (TSO, por sus siglas en inglés).

Subrayó que REE fue "pionera en el mundo" en implantar este esquema y aseguró que "todas las sociedades desarrolladas" han ido evolucionando hacia el mismo.

"No tendría sentido, y así lo piensa el Gobierno, deshacer un modelo que no ha deshecho nadie que lo haya conseguido ya", aseveró Atienza, que dijo que se trata del modelo que mejor se adapta a las característica y necesidades del sistema eléctrico.

El presidente de REE lamentó la confusión generada y dijo que, en un momento como el actual, es muy importante contar con estabilidad para poder afrontar las inversiones que necesita el sistema eléctrico en España, a lo que añadió que el Gobierno "está comprometido con esa estabilidad".