Los resultados del último trimestre del año dejaron a la empresa unos beneficios de 285 millones de euros, un 9 por ciento más que en el mismo período del año anterior.

En octubre, noviembre y diciembre el beneficio de operaciones de la cadena de supermercados aumentó un 49 por ciento.

"En 2008 hemos ofrecido resultados muy sólidos, en particular en el último trimestre", destacó en la nota el consejero delegado del grupo, John Rishton.

Con las cuentas anuales en la mano, Rishton anunció un aumento de los dividendos del 12 por ciento, hasta los 0,18 euros por acción.

"A pesar del continuo deterioro de la situación económica, en las primeras semanas de 2009 no hemos visto cambios significativos en el comportamiento de los consumidores", aseguró.

Rishton explicó que el objetivo de la dirección es aumentar este año un 5 por ciento las ventas y el margen de beneficio en sus operaciones.