Las últimas correcciones experimentadas por Repsol han llevado al valor, una vez más, a la base del canal alcista de largo plazo, por definición zona de soporte, que pasa en este momento por el entorno de los 17,30 euros. Además, el movimiento lateral bajista que se inició el pasado noviembre ha hecho que tengamos a la acción cotizando en el mismo nivel en el que se encontraba en agosto y en mayo de 2013. Dicho esto, en teoría cabría barajar como escenario más probable una reestructuración al alza por parte del precio en busca de la parte alta del canal, ahora en el entorno de los 20,75 euros.

JM.R.