“No he hablado antes de la compra de Beats por parte de Apple por una razón principal: me deprime”, afirma Cody Willard, autor de TradingWithCody y colaborador de MarketWatch. En primer lugar, se declara, “una vez más, decepcionado por la visión de Tim Cook del futuro”.

Personalmente, explica, “he explicado en múltiples ocasiones que los servicios 'en la nube' de Apple, donde se puede ver cualquier programa de televisión o escuchar cualquier canción que uno se haya descargado a un dispositivo móvil de la compañía, es su siguiente paso para mantener la 'marcha' de iPod, iPhone, iPad”.

Y es que, señala, “la ventaja de la que ha disfrutado Apple con iTunes ha empezado a erosionarse, ya que Pandora o Spotify han comenzado a cambiar los hábitos de consumo musicales, con los usuarios migrando de las descargas únicas a servicios de streaming de todo incluido”.

Opina Willard que en el mejor de los casos “Beats es una versión de segunda clase de Spotify y en el peor de los casos una compañía de accesorios cara”. La buena noticia, añade, es que los 3.000 millones de la oferta no son mucho dinero para los accionistas de Apple.

“Me gustaría que Apple gastara ese dinero y tiempo en una mejora (muy necesitada) de su sistema operativo, así como de sus gadgets, más que en la compra de un accesorio de moda vinculado a una empresa de aplicaciones de música”, concluye.

S.C.