Tensas han sido las últimas semanas para aquellos inversores que apostaron fuerte por los valores de momentum, redes sociales o biotecnológicos, señala Howard Gold, colaborador de MarketWatch y fundador de GoldenEgg Investing. Facebook o Tesla se han dejado por el camino cerca de un 20% de su valor, Netflix o Amazon han perdido aún más, Twitter, por ejemplo, un 40%. Pero el Nasdaq Composite o el Russell 2000 han cedido un 10%, mientras que el S&P 500, un 2,4%... “Así que, aunque he escrito que este año la renta variable podría sufrir su mayor corrección desde 2011, no estoy seguro de que sea esta. Pero si es así, probablemente sea algo bueno. Los mercados que experimentan correcciones decentes se mantienen sanos más tiempo que aquellos que permiten que las ‘mini-burbujas’ se agraven”, afirma.
Es cierto que la renta variable cayó en enero y eso es una mala señal técnica, además, el S&P 500 está sólo 10 puntos por encima de su nivel del 31 de diciembre de 2013; mientras el VIX subió por encima de 21 en febrero (ahora cotiza por debajo de 15). Si bien, mientras los principales índices se “estancaron”, los valores de momentum siguieron “calentándose”… No obstante, “los inversores individuales no prestaron atención, envalentonados por el gran rendimiento del año pasado, siguieron apostando por estas compañías cuando alcanzaron ya el sobrecalentamiento”, explica Gold.
Ahora, señala, en el selloff “están pagando el precio de perseguir la rentabilidad, pero al resto nos están haciendo un gran favor. Porque cuando la ‘espuma’ desaparezca de ciertos sectores, el mercado en su conjunto será más razonable”. Muchas acciones, impulsadas por la fiebre especulativa y el dinero barato (biotecnología, Internet, Redes sociales…), están “recibiendo su merecido, pero la renta variable en su conjunto aún tiene un largo camino por recorrer antes de que llegue una corrección decente. Muchas cosas podrán causarla, incluyendo unos resultados del primer trimestre más débiles de lo esperado, pobres datos macro, el hecho de que estamos entrando en dos de los peores trimestres para la bolsa en el ciclo presidencial… Pero las causas principales de un genuino mercado bajista (recesión, deflación, subida rápida de tipos…) no están en el horizonte", concluye.
S.C.