España ha propuesto a los acreedores de nueve autopistas fracasadas que admitan una quita del 50% en la deuda a cambio de que el Gobierno pague unos 2.300 millones de euros en bonos a 30 años, según fuentes citadas por Reuters.

La agencia ha indicado que el Gobierno formará una empresa estatal que tomará el control de las autopistas de las concesionarias y que dicha compañía emitirá la deuda. Una de las fuentes asegura que la emisión no tendrá impacto sobre el déficit público.

J.M.