Conquistados los 2.000 puntos, el S&P 500 se prepara para su siguiente objetivo: los 2.150, que podríamos ver hacia finales de este año. Para ello, sólo tiene que subir algo menos de un 8%.

Así lo afirma Sam Eisenstadt, exdirector de Value Line, donde estuvo más de 60 años. Hace seis meses, cuando el S&P cotizaba por encima de los 1.800 enteros, el modelo de Eisenstadt predijo que el índice tocaría los 2.100 puntos en septiembre, una previsión que hasta él mismo reconoció que era demasiado buena para ser verdad.

Ahora, con los 2.000 puntos ya conquistados, el modelo de Eisenstadt, que sólo abarca hasta los próximos seis meses, indica que los 2.150 llegarán a finales de este año. Aunque en la sesión de hoy el S&P está haciendo poco por avanzar hacia ese nuevo récord.

A media sesión, el índice cotiza prácticamente plano ( ,0,1%), al igual que el Nasdaq. El Dow Jones se mueve un poco más y cotiza con una subida del 0,10%.

“Tuvimos un gran movimiento ayer. Esos grandes números redondos tienen un impacto psicológico en los inversores, que han tomado una pausa en lugar de ir significativamente en una dirección o en la otra”, indica Mark Luschini, de Janney Montgomery Scott. “Estamos flirteando con el hito de los 2.000 en el S&P 500, y hay una falta de catalizadores para mover los precios por encima de ese nivel”.