Pese a la corrección de ayer en el Dólar/Yen lo cierto es que el aspecto técnico de este cruce no ha cambiado lo más mínimo. De hecho, desde finales de octubre, el subyacente presenta una impecable sucesión de mínimos y máximos crecientes y así, como ya conocen de sobra, sólo cabe seguir escalando posiciones. El primer soporte de corto plazo lo encontramos en los 102,161 (mínimos de hace una semana). Y mientras tanto lo cierto es que no podemos descartar que en cualquier momento el cruce experimente un nuevo tramo alcista hacia niveles cercanos a los 103,923 (los máximos anuales alcanzados el viernes pasado).
JM.R.