“Vivimos en la era los inversores activistas”, afirma Philip Van Doorn, columnista de MarketWatch, en un interesante artículo que repasa los diez valores que “pronto deberían estar” en la lista de grandes éxitos.

Los inversores institucionales, explica, “pueden conseguir grandes cambios en una empresa” que beneficien al pequeño inversor. Hace cinco años, ¿quién habría pensado que Apple pagaría enormes dividendos y recompraría miles de millones de dólares en acciones? Den las gracias a Carl Icahn”.

Así, ha elaborado una lista de grandes empresas que podrían experimentar el efecto beneficioso de los institucionales. Para ello, se ha centrado en las compañías del S&P 500 con un valor de mercado de al menos 50.000 millones de dólares, seleccionando a los conglomerados industriales, las empresas químicas diversificadas, dos gigantes del hogar o del cuidado personal, y un grupo de alimentación y bebida diversificado.

Y aquí tenemos a su selección: General Electric, Procter & Gamble, United Technologies, 3M, Honeywell, Dow Chemical, DuPont, Mondelez International, Colgate-Palmolive y Danaher.