Números rojos en Asia durante la última jornada de la semana, especialmente destacados en Japón y Hong Kong (el Nikkei se ha dejado un 1,94%, hasta los 15.391 puntos), que han llevado al selectivo regional, el MSCI Asia Pacific Index, a caer un 1,91%, y a registrar su peor racha semanal en más de 18 meses. Llama también la atención el comportamiento del dólar australiano, que ha retrocedido hasta mínimos de tres años y medio, ante el mayor repunte del riesgo crediticio asiático en tres meses.

Las bolsas han optado por las pérdidas esta semana ante unos resultados mixtos y la debilidad mostrada por ciertos datos macroeconómicos en China, unida, de nuevo, a las preocupaciones en torno a cómo la retirada de estímulos de la Rerserva Federal (Fed) afectará a los mercados asiáticos.

"La posibilidad de una corrección está ahí (…) debemos esperar más volatilidad. Las acciones ya no van a estar tan baratas y eso significa que las ganancias fáciles han quedado atrás y ahora dependemos más de la mejora de los resutaldos empresariales que se vayan publicando", explica Shane Oliver, de AMP Capital Investors, a Bloomberg.

S.C.