Las bolsas europeas optan el viernes por las pérdidas y retroceden de media un 0,20%.El apetito por el riesgo ha recibido esta semana un “duro golpe” en palabras de Danske Bank, pues las tensiones geopolíticas van en aumento y “los débiles datos de la Zona Euro están incrementando la preocupación sobre la débil recuperación” del Viejo Continente. En concreto, la firma destaca el mal comportamiento del selectivo alemán, el Dax, que en el último mes ha caído un 10%. Además, añade: “Los diferenciales de crédito y de la deuda periférica también se están ampliando”.

Para estos analistas los movimientos bursátiles a los que hemos asistido “se corresponden en gran medida con los que vimos durante el verano de 2013”, cuando el foco de la aversión al riesgo se situaba, en lugar de en Europa, en los mercados emergentes. En este sentido, consideran que “si se repite el patrón” pronto deberíamos ver un suelo en la caída del apetito por los activos de riesgo como la bolsa.

La gran pregunta es, para Danske Bank, si asistiremos a más caídas o si es el momento de “comprar en los descensos. Desde el punto de vista fundamental nos sentimos inclinados a apostar por esta segunda opción. El crecimiento mundial se está acelerando y los bancos centrales continúan proporcionando estímulos masivos y prometen tipos de interés bajo por un largo periodo de tiempo. Así, aunque la crisis en Ucrania se ha intensificado esta semana con las nuevas sanciones por parte de Rusia, los efectos directos a través de los vínculos comerciales son todavía bastante limitados. Probablemente, tendrán un efecto pequeño en el sentimiento inversor, y ya lo estamos viendo, pero desde nuestro punto de vista no va a ser suficiente como para dañar a la actividad económica global”.
UCRANIA: “OJO POR OJO” Y LA SITUACIÓN PODRÍA ACABAR FUERA DE CONTROL
No obstante, estos expertos reconoce que “la incertidumbre está aumentado y el desarrollo de la política actual no es muy previsible, por lo que un 'ojo por ojo' podría acabar con la situación fuera de control, así que recomendamos precaución en el corto plazo”. En su opinión, hay dos factores determinantes que podrían dar lugar “a un mayor impacto en la economía global”:
- Rusia mueve sus tropas a través de la frontera de Ucrania, lo que provocaría una severa escalada de las tensiones que implicaría una incertidumbre muy alta, una fuerte respuesta por parte de Occidente en términos de más sanciones y más duras, también por parte de Rusia.
- Los suministros energéticos y de gas se convierten en parte de la guerra económica. Teniendo en cuenta los limitados vínculos comerciales directos desde Rusia a Europa, creemos que esta es el área principal donde la Unión Europea (UE) podría ser golpeada más duramente.

Ninguna de estas opciones “está en nuestro escenario base, pues creemos que la crisis no va a tener un impacto importante en la economía europea y que ambas partes son conscientes de que llevar el conflicto a un nivel superior tendrían graves consecuencias. Pero cualquier señal de que las tensiones van en aumento y podría derivar en cualquiera de los dos factores descritos anteriormente justificaría una gran precaución. Todavía creemos que las ventas masivas a las que hemos asistido son parte de una corrección dentro de un mercado alcista, pero la situación política en Ucrania debe ser vigilada de cerca”, concluyen desde Danske.

DESDE LOS MÁXIMOS DEL AÑO EL IBEX 35 CAE UN 11% Y EN LA SEMANA...
En cualquier caso, el impacto inicial en los mercados europeos no sólo del enfrentamiento entre Occidente y Rusia, sino también de la crisis del banco portugués BES y de los débiles datos macroeconómicos de la Zona Euro, ya se ha dejado sentir. Y es que, desde los máximos anuales las principales bolsas de Viejo Continente (Ibex, Cac, Dax...) han caído cerca de un 11%. Mientras que Italia se ha dejado un 16% y Portugal, un 30%.

Es más, en la semana a la que la jornada del viernes pone punto y final las bolsas europeas se han dejado por el camino un 2,25% de su valor. En concreto, el Ibex 35 acumula descensos del 3,9% y el lunes partirá de los 10.104,8 puntos (tras subir en esta sesión un 0,26%).

Técnicamente, el analista de Bolsamanía, José María Rodríguez, reitera que se dan las condiciones para apostar por un rebote de cierta entidad hasta los 10.420-10.425 puntos, anterior zona de soporte ahora resistencia. Sin embargo, debemos ser conscientes de que se trataría de un repunte dentro de una clara tendencia correctiva de corto plazo, “no del final de las caídas”, concluye.