“La Fed tiene margen para llevar a cabo el tapering, porque los fundamentales en Estados Unidos son sólidos”. Los estrategas de Cortal Consors BNP Paribas lo tienen claro: si no se inició la retirada de estímulos en septiembre fue por el problema fiscal al que se enfrentaba el país, un problema que se revivirá el año que viene, y del que de nuevo dependerá que haya o no tapering en marzo. Así lo ha explicado Estefanía Ponte, directora del departamento de Economía y estrategia de Cortal Consors, que hoy ha presentado las perspectivas para 2014 de la firma bajo el titular “¿2014, año de confirmación?”.

Cortal Consors es este año la primera firma en lanzar sus perspectivas para un 2014 para el que “empezamos a ver un cierto grado de optimismo y, aunque seguimos siendo positivos, hemos bajado el grado y somos más prudentes que el consenso”. Esta postura, como explican en Cortal Consors, les ha convertido en una de las firmas conservadoras, después de ser los más optimistas.

MARGEN PARA EL TAPERING

Estefanía Ponte está convencida de que los fundamentales de la economía de Estados Unidos son sólidos y, por tanto, asegura que si la Fed no inició el tapering en septiembre fue por los problemas fiscales del país, que provocaron el cierre del Gobierno de Washington (shutdown) y el bloqueo en los presupuestos por la incapacidad de demócratas y republicanos de elevar el techo de deuda. “Lo que nos preocupa es que en 2014, el 16 de enero, cuando vence el presupuesto, y el 7 de febrero, cuando debe negociarse el techo de deuda, podríamos ver otra vez un Estados Unidos paralizado”, advierte Ponte, que cifra en un 0,3% lo que el shutdown de octubre ha restado a la economía de Estados Unidos. “Con paralización o no del Gobierno, este horizonte de fechas genera dudas en el empresario americano”, concluye.

Esta analista avisa además de que debería haber habido más inversión en Estados Unidos, porque se han creado más empleos en el sector privado de lo que se correspondería con la inversión en bienes de equipo. Sin embargo, este escenario tiene una lectura positiva: se han producido cambios en la economía del país que han propiciado esto.

Matices a un lado, en Cortal Consors han analizado los indicadores que usa la Fed en el mercado laboral y “ninguno se ha recuperado a niveles previos a la crisis ni llega a la media desde 1995”, lo que justifica los estímulos de la Fed, pero no hay riesgo de deflación y los datos del mercado inmobiliario ya están consolidados: “No compartimos la preocupación de que el mercado inmobiliario se vaya a dar la vuelta”. La conclusión, por tanto, es que Bernanke impuso la situación fiscal a los sólidos fundamentales de la economía para justificar el retraso del tapering en septiembre.

“La Fed tiene margen para llevar a cabo el tapering, pero hay que esperar a que se resuelva el problema fiscal, así que prevemos el inicio del fin de los estímulos para marzo (…) Otra fecha clave será el 4 noviembre, cuando se celebran elecciones a las dos cámaras del Congreso y hay riesgo de que vuelvan a quedar divididas entre demócratas y republicanas”.

ZONA EURO Y ESPAÑA, DEBERES HECHOS

“Sí, estamos viendo una recuperación, y sí, se han hecho los deberes”. En Cortal Consors son optimistas en la región de la moneda única, aunque descartan la posibilidad de que el Banco Central Europeo (BCE) vaya a optar por los tipos de depósitos negativos, porque “no sería efectivo”. Sin embargo, destacan que el BCE esté intentado dejar claro con estos mensajes que libran otra guerra distinta a la del Banco de Inglaterra. Del equipo de Mario Draghi esperan más LTROs y que se relajen los haircuts de colaterales para los créditos de pymes.

En el caso concreto de España, “dijimos que salíamos, y salimos, porque la base para la salida de la crisis está construida”. En Cortal Consors se quejan, sin embargo, de que “lo que no se ha hecho ha sido invertir en tecnología. No hay una inversión que respalde la creación de empleo, una creación de empleo que no la veremos hasta el segundo semestre del año que viene”.

BOLSAS, FINAL DE AÑO ABURRIDO

Ponte no espera que haya rally de Navidad este año, porque “todas las buenas noticias ya se han descontado y no vemos factores que tiren de las bolsas”, pero advierte sobre el comienzo del año que viene, de nuevo con el argumento de los problemas fiscales en Estados Unidos. En cualquier caso, Cortal Consors sitúa el potencial tanto del S&P como del Eurostoxx en el 14% en 2014, y esperan un Ibex 35 en los 10.700 puntos. Hoy se mueve en los 9.693 puntos, con caídas de casi el 1%. El resto de Europa se deja a media sesión un 0,8% de media.

Para lo que resta de ejercicio, Cortal Consors no modifica su previsión de un Ibex 35 en los 9.400 puntos, y explica que si no ven al selectivo por encima de los 11.000 el año que viene es porque para ello, la prima de riesgo debería bajar a 150 puntos, y esta firma ve al riesgo país en los 200-220. Aunque no esperan una corrección, en Cortal advierten que la bolsa española está cara”.

Con más detalles sobre valores con nombre propio, la firma reconoce que los tests de estrés les obligan a ser cautos con los bancos, pero no por pesimismo, sino porque “ya han hecho lo que esperábamos (…) Han subido mucho”. El analista técnico de la firma, Óscar Germade, ha lanzado algunas apuestas, pero matizando que siempre “forzando los filtros con los que trabajo”. En el Ibex, seleccionaría Técnicas Reunidas, Enagás y Acerniox, y de entre los bancos, “nuestra apuesta favorita es Bankinter, aunque también tenemos Banco Popular con menos exposición. De entre los grandes, nos quedamos con BBVA”.

María Gómez