Los ingenieros de la compañía han rechazado la propuesta de inundar los reactores de la planta dañada, lo que podría bajar la temperatura en días en lugar de meses. Hasta que se normalice la situación de Fukushima
los reactores serán vulnerables a posibles réplicas y a fugas de radiación según una fuente consultada por la CNBC.

Desde que el terremoto de fuerza 9 azotara la región de Fukushima, ha habido cientos de réplicas, incluyendo una esta semana que afectó a la planta y a los sistemas de enfriamiento durante casi una hora. “A medida que la crisis se prolonga, hay riesgo de nuevos accidente” ha dicho Pierre Zaleski, antiguo miembro de la Comisión de Energía Atómica francesa.

“El mayor problema son estas réplicas” ha declarado Zalenski. “Nunca sabes si puede haber más replicas o si la contención puede fallar” ha añadido. Tepco es reacia a inundar sus reactores porque el movimiento podría generar mala publicidad para la compañía. “La inundación podría incrementar la cantidad de agua contaminada que va al océano y también podría aumentar las posibilidades de que hubiera una explosión de hidrógeno dentro de la vasija de contención” ha afirmado Pierre.