Hay varias cosas que hay que tener en cuenta al hacer la declaración de la renta. Lo primero es dedicarle tiempo al borrador que emite la Agencia Tributaria, validarlo punto por punto y rectificarlo si es necesario, ya que el borrador de la declaración de la renta es una estimación que elabora Hacienda basándose en los datos de nuestros ingresos y retenciones, pero no es el definitivo y si lo envías tal cual no podrás beneficiarte de reducciones o deducciones fiscales estipuladas por la ley como estas:

- Si compraste tu vivienda antes del 2013 y tienes una hipoteca, aumenta la inversión en el pago del préstamo de la vivienda habitual hasta un máximo de 9.040 euros, ya que disfrutarás de una deducción de hasta el 15 % de la cantidad aportada.

- Comprueba si puedes desgravarte por vivir en alquiler. La desgravación estatal es para las personas que firmaron su alquiler antes de 2015 y tengan rentas inferiores a 24.107,2 euros (permite deducir un 10,05 % de las rentas satisfechas).

- Desde el otro lado, si eres propietario de un inmueble, se recomiendan alquilar las viviendas como residencia habitual, porque de esta manera puedes beneficiarte de una reducción del 60%.

- Hacer aportaciones a planes de pensiones antes de que termine el año, ya que Hacienda nos devuelve parte del dinero que hemos invertido. Te puedes desgravar hasta un máximo de 8.000 euros, siempre que no supere el 30 % de los rendimientos del trabajo y actividades económicas. También pueden realizarse aportaciones al plan de pensiones del cónyuge hasta un máximo de 2.500 euros.

- Comprueba si puedes incluir a tus hijos en la declaración de la renta. Para ello, es necesario que los hijos vivan con sus progenitores. En caso de que alguno de los hijos sea económicamente dependiente de sus padres, pero viva fuera también se pueden incluir. En estos casos se pueden incluir en la declaración de la renta a los hijos menores de 25 años siempre y cuando no hayan obtenido una renta propia superior a 8.000 euros mensuales, y hayan presentado la declaración de forma independiente con renta superior a 1.800 euros. Los mayores de 25 años también se pueden sumar a la declaración siempre y cuando sufran alguna minusvalía superior al 33%.

- Deducción por maternidad: Si eres madre ten en cuenta que Hacienda regula la deducción por maternidad por hijos menores de tres años de hasta 1.200 euros anuales, por hijo nacido o adoptado en el territorio español.

- Si eres familia numerosa, también tiene ventajas en la Declaración de la Renta: se pueden deducir más en el mínimo personal y familiar.

- Algunas inversiones también pueden desgravar en la Declaración de la Renta: invertir directamente en empresas de nueva creación permite deducir hasta un 30% de la cantidad invertida, hasta un máximo de 60.000 euros.

- Si pagas cuotas sindicales, de partidos políticos, colegios profesionales, ONG o fundaciones, comprueba si puedes disfrutar de deducciones o minoraciones.

- Si eres mayor de 65 años, estás exento de tributar las ganancias obtenidas al vender tu vivienda habitual, así como al desprenderte de cualquier bien o derecho si los fondos se reinvierten en una renta vitalicia.

- Realiza donativos: podemos deducir hasta un 75% de la cuota de donativos a las fundaciones para los primeros 150 euros y un 30% para el resto.