Powell no quiere que llamemos QE a la enorme inyección de liquidez que está realizando en los mercados financieros a través de las operaciones “repo” para que no parezca que, diez años después de lanzar el primer QE, volvemos al punto de partida

El “no QE” lanzado por el FED ha provocado un aumento del balance del FED de 200 mil millones de dólares en un solo mes, al ritmo más rápido desde 2008.

Para conseguir aumentar el nivel de reservas bancarias significativamente por encima de los niveles actuales, el FED necesitará recurrir a pagarés en poder de bancos centrales de otros países y fondos del mercado monetario, o bien ampliar el abanica de bonos elegibles.

Lo importante ya no es el instrumento que elija, sino la razón por la que el FED ha optado por inyectar esta cantidad enorme de liquidez.

Según JPMorgan, es probable que, a pesar del QE del Banco Central Europeo, si el FED no hubiese procedido a realizar esas operaciones la liquidez a nivel mundial (al menos, el balance de los bancos centrales del G4) se contraería por la reducción de las compras del Banco de Japón, lo que hubiera provocado una caída de las bolsas.

Por lo tanto, vamos a considerar como escenario más probable que el balance de los bancos centrales alcance en los próximos meses un nuevo record histórico, lo que probablemente impedirá que las bolsas perforen soportes significativos.

Más de 70 empresas del S&P 500 publicaron los resultados del tercer trimestre la semana pasada. De esas compañías, el 81% publicó resultados mejores de lo esperado, según muestran los datos de FactSet. Estos datos revelan que las cuentas de resultados de las empresas están resistiendo.

A pesar de lo anterior, el S&P 500 retrocedió en la sesión del viernes, marcó un mínimo en 2.973 y desde ese nivel rebotó para cerrar en 2.987.

Nos vamos a fijar en el 3.000, mientras el S&P 500 se mantenga por debajo consideraremos como escenario más probable que se dirija a la zona de los 2.945.

La perforación del 2.945 sería un signo de gran debilidad a corto plazo.

En la sesión del viernes el NASDAQ 100 marcó un mínimo en 7.829. Mientras se mantenga por debajo de 8.000, consideraremos como escenario más probable que se dirija a la zona de los 7.780. La perforación del 7.780 abriría el camino al siguiente nivel de soporte, 7.460.

Con la subida a la apertura del viernes, el DAXXetra concluyó el tramo al alza desplegado desde los mínimos del 4 de octubre, y que hemos denominado el rebote del Brexit.  Y ha iniciado, por el momento, una fase correctiva. Nos fijaremos ahora en 12.500. Mientras se mantenga por encima, predisposición alcista. Su perforación avisaría de un movimiento hacia el soporte de la zona 11.900.

El IBEX 35 se comportó de manera similar al DAX. Hizo un máximo en 9.500 el pasado viernes y desde ese nivel retrocedió hasta 9.300, donde se paró el movimiento a la baja.