La cotización del “crude oil” se desplomó en la sesión de ayer, cayó por debajo de los 56$, el nivel más bajo del año.
Este hecho reduce lógicamente las presiones inflacionistas, pero la desaceleración económica que está sufriendo China vuelve a traer a primer plano los riesgos deflacionistas.
Los bonos han reaccionado con alzas en los precios a los fuertes descensos experimentados por las bolsas en el pasado lunes, sesión en la que los mercados de renta fija estuvieron cerrados.
Los inversores estarán atentos el miércoles a las palabras que pronuncie Powell una vez que los mercados hayan cerrado. Quieren ver si Powell se ratifica en que al FED le queda todavía un largo camino por recorrer antes de alcanzar un nivel neutral.
En comentarios anteriores, he dicho que el S&P 500 se mueve al son deApple.
Apple cerró por debajo de los mínimos del martes y su tendencia bajista permanece intacta.
Los valores de mayor capitalización del sector tecnológico se muestran muy débiles a corto plazo. El sector tecnológico es uno de los sectores de mayor capitalización del mercado y, por ese motivo, su comportamiento lidera el movimiento del S&P 500.
El NASDAQ 100 rebotó durante la primera parte de la sesión y llegó a marcar un máximo en 6.950 y desde ese nivel se giró a la baja para llegar a marca un mínimo en 6.811, nivel similar al de los mínimos del lunes.
La imposibilidad de cerrar por encima de 6.900 hace muy probable que el movimiento a la baja continúe durante los próximos días. Por ese motivo, vamos a considerar como escenario más probable que el NASDAQ 100 se encamine a la zona de 6.575, mínimos alcanzados el pasado 29 de octubre.
El S&P 500 también rebotó al poco de abrir, llego a la primera zona de resistencia, situada en torno a 2.750, y se giró a la baja y volvió a la zona de los mínimos del pasado martes. Este giro es un signo de debilidad y, por lo tanto, vamos a considerar como escenario más probable que el S&P 500 continúe cayendo hasta la zona de los 2.600-2.550.