Inflación en Estados Unidos: semana crucial en los mercados y cómo puede afectar a España

Según la Fed de Cleveland que en el pasado ha dado en el clavo en las lecturas finales de inflación, el dato del IPC de octubre será de 8,06% ligeramente por encima del 8% que espera el mercado. “Esto significaría un crecimiento menor de los precios que el mes pasado y hablaría de una ralentización del aumento de los precios mes a mes en los últimos cinco meses”, apunta Sergio Ávila, analista de IG.

La inflación general de septiembre se situó en el 8,2%, mientras que el IPC subyacente alcanzó el 6,6% y ahora se espera que se reduzca hasta el 6,5%. El IPC subyacente, que excluye energía y alimentos frescos, alcanzó máximos desde agosto de 1982, se situó por encima de lo esperado por el mercado y escaló tres décimas con respecto al mes anterior, lo que muestra que el coste de vida de los estadounidenses continúa su camino al alza pese el aumento del coste del dinero por parte de la Reserva Federal.

A pesar de ello, los mercados terminaron cerrando en positivo el pasado 13 de octubre y desde ahí arrancó el rebote en las bolsas en las últimas semanas. La hoja de ruta parece clara y las subidas de tipos a corto plazo están ya descontadas, sin embargo ahora los inversores esperan ver que la inflación empieza a hacer techo para poner fecha de finalización a la subida de tipos. 

Los mercados también continúan evaluando las noticias procedentes de China, donde el Gobierno de Xi Jinping reiteró su compromiso con la política de duras restricciones para frenar el coronavirus durante el fin de semana, frustrando las esperanzas de un cambio de política que estimuló un repunte del riesgo la semana pasada. Las medidas de cero Covid-19 en China son un soporte para la inflación en los países occidentales, ya que el comercio mundial aún no se ha normalizado.

¿Qué implicaciones tiene para España?

La inflación en EEUU tiene implicación directa en la estrategia de los bancos centrales occidentales como el Banco Central Europeo (BCE). Si la subida de precios generalizada en EEUU empieza a desacelerarse esto implicará un ajuste monetario menos agresivo, con posibles alzas de tipos de menor porcentaje o incluso una relajación en las subidas del coste del dinero. Mientras que si el IPC no da tregua, la hoja de ruta más agresiva seguirá estando encima de la mesa.

La subida de tipos de la Reserva Federal está haciendo que el BCE siga su estela para no devaluar en exceso el tipo de cambio euro/dólar, que a fin de cuentas es un factor inflacionista al tener que comprar las materias primas en dólares. Un dólar fuerte debilita la balanza comercial de los países europeos, ya que incrementa el coste de las importaciones de petróleo, gas natural y otros materiales básicos que se pagan en la divisa estadounidense.

Para las familias hipotecadas si los bancos centrales levantan el pie del acelerador de las subidas de tipos supondrá un alivio en sus cuentas. El euríbor, el índice de referencia de las hipotecas variables en España, evoluciona en función de los tipos de interés que fija el BCE y por tanto unos tipos de interés estables o no tan elevados en el medio plazo deberían frenar el incremento del euríbor en los próximos meses.