-¿Qué se pude decir sobre el PIB trimestral y los PMIs manufacturero y de servicios?

-Se prevé que para el año actual, el PIB va a tener un crecimiento anual de casi el 9%. Esperamos que con la reactivación de la economía, para finales de 2021, se pueda decir que la acción manufacturera va a poder producir y generar mayores ingresos para el país.

El hecho de que haya habido una paralización mixta durante más de un año ha ocasionado que el PIB pueda mantenerse a niveles bajos con relación a los normales. Se espera que con la reactivación de las industrias, el retorno a los centros de trabajo... pueda reactivar la economía que está tan desgastada y poder tener un incremento bastante favorable.

Por otro lado, las proyecciones que se ven para los próximos dos años, es que para el 2022 el PIB crecería un 3,8% más y para el 2023, un 2,5%. A pesar de las circunstancias, tenemos que ser muy positivos.

-La decisión de la Fed de adelantar la subida de tipos de interés a 2023 afectó a los índices de Wall Street. Además, la Fed elevó de manera importante sus previsiones de inflación para 2021; incluso confirmó que habían comenzado a debatir la retirar de su programa de compra de activos.

-La inflación en EEUU es muy fuerte. En otros países tener una inflación de 3, 4 o 5% no supone nada, pero para EEUU es preocupante. Esta brecha de no haber generado una buena economía durante más de un año y que hayan caído las ventas hace que el IPC, en concreto, los alimentos hayan tenido un alza tremenda. Aunque según el departamento de trabajo, se estima un IPC del 2,2% pero la realidad es que los precios han subido entre un 15 y un 25%. Lo que más ha subido es la energía. Esos valores han subido casi un 29%, según el departamento de trabajo. Y la inflación promedio está en torno al 3,8%. 

El hecho de generar dinero sin respaldo provoca inflación. La gente no está trabajando y muchas personas han solicitado el desempleo y algunas no han regresado al trabajo porque ese seguro de desempleo es mayor que lo que ganaban trabajando. Esto está creando un tremendo hoyo en la economía del país, donde se está generando dinero sin respaldo. 

Esto se está haciendo no solo para ayudar, sino para que puedan pagar sus deudas o para generar compras y que la economía se pueda mover. No es algo bueno ni malo, es una disyuntiva que el gobierno tiene que pensar como velar por el bienestar de sus ciudadanos.

Por otro lado, vemos que la inflación podría ir en caída para finales de 2021 y, yo diría que, por lo menos, hasta el primer trimestre de 2022 porque la recuperación no va a ser tan rápida. A pesar de que se está empujando a que las empresas llamen a sus empleados a regresar a las oficinas, el hecho de que las personas transiten en la calle, genera un movimiento económico.

-¿Crees que dependiendo de la evolución de la inflación y del tema de desempleo, la Fed podría adelantar la subida de los tipos de interés antes de 2023?

-Si somos optimistas, el interés no va a subir hasta fin de año, porque eso crearía todavía más inflación. El hecho de que no hay dinero circulante es todo una cadena. No se trabaja, no se genera, no se mueve, hay escasez de dinero y los intereses suben. Si revertimos la cadena, los intereses tienen que mantenerse a un nivel bajo y tratar de mejorar nuestra economía.

-Otro tema muy importante que afecta a las relaciones entre EEUU y Europa es el acuerdo al que han llegado para resolver una disputa de 17 años sobre los subsidios gubernamentales para sus respectivos fabricantes de aviones, Boeing y Airbus. Las dos partes acordaron suspender por cinco años los aranceles comerciales. Esto beneficia a muchos productos europeos y españoles como el vino, el aceite, las aceitunas... ¿Qué supone esto y cómo cree que será esta nueva relación comercial entre Biden y Europa?

-La relación va a ser bastante buena. Los aranceles ayudan a que haya un ingreso para cada país exportador. Por otro lado, ayuda al consumidor porque en la medida que no hay aranceles, los precios se van a mantener bastante estables y bajos para que el consumidor pueda pagarlos. 

Ha sido una disputa de 17 años y por el momento pienso que esto se está haciendo para ayudar a todos los países que han sido afectados por la pandemia y durante más de un año se han visto con una economía prácticamente paralizada.

Pienso que es un acuerdo fundamentado en tratar de incentivar el consumo a precios relativamente bajos y estables para que puedan ser pagados por el consumidor. 

-¿Las relaciones comerciales entre EEUU y Europa serán diferentes con respecto a como eran con Trump?

-Serán mucho más cercanas. Los gobiernos europeos son de tendencias muy similares a la existente en EEUU, de tendencia democrática. Sus planes de gobierno y sus ideas son muy parecidas a la mayoría de países europeos. Hay una buena amalgama entre las relaciones de los países europeos y los EEUU. Va a ser mucho más cordial de lo que ha sido en la era de Trump.