José Luis Cava comienza con el mercado del oro, cuya cotización “se encuentra en una clara tendencia alcista” y ha marcado “casi los 4.380 dólares”, camino de los 4.500. Afirma que el oro transmite un mensaje contundente: “El sistema, el orden monetario actual, se está viniendo abajo”. 

Explica que los especuladores eligen entre invertir en oro o en criptomonedas. Dado que Bitcoin y Ethereum “se encuentran en un movimiento lateral con gran volatilidad”, mientras el oro sube con fuerza, “prefieren irse al oro porque es más fácil de ganar.” Añade que “el oro se ha convertido en una máquina de ganar dinero, de regalar dinero para los especuladores de bien”. Sin embargo, cuando el oro se frene o entre en movimiento lateral, el experto cree que el dinero volverá a las criptomonedas, que entonces “desplegarán una nueva onda al alza”.

A continuación, analiza la M2 global, que combina la M2 de los países del G7. Aunque considera que es “un indicador malo”, reconoce que sirve como “proxy de la liquidez a nivel global”. Subraya que la M2 está en “una clara tendencia alcista” y que el oro “está siguiendo la línea de la M2”. En cambio, “un poco más abajo” se sitúa Bitcoin. En su opinión, si el oro se detiene, los especuladores podrían pasar a Bitcoin, generando “un tramo al alza”.

Luego pasa a Wall Street, donde lo más importante, dice, fue “el latigazo que le metieron al ETF de los bancos regionales”. Esto, señala, ha “abortado la tendencia alcista del índice Russell 2000”. Explica que la caída se produjo al romper soportes y que las excusas de mercado apuntan a dos causas: los malos resultados de dos entidades financieras, “que han incurrido en pérdidas por el aumento de las dotaciones para impagados,” y el temor a un aumento de la morosidad en tarjetas de crédito, cuyo saldo asciende a “1,3 billones de dólares”. Sin embargo, considera que estas justificaciones “ya se conocían” y que el riesgo afecta sobre todo a personas con ingresos bajos, por lo que lo califica de “excusa no muy potente”.

La segunda razón, más seria, es la falta de liquidez en el sistema financiero estadounidense. Explica que el diferencial entre los tipos de interés de las operaciones repo de los bancos con la Fed y entre ellos se ha ampliado, lo que “significa que ahora mismo hay problemas de liquidez”. En su opinión, el origen está en la reducción del balance de la Reserva Federal. Las reservas bancarias rondan los 3 billones, cifra “borderline”: si cae por debajo, “habría problemas de liquidez”. Por eso, “Powell dijo que lo más probable es que pusieran fin al QT”.

Cava aclara que cree que la situación es temporal: “Cuando haya riesgo de colapso, Powell inyectará liquidez”. Muestra cómo las primas de riesgo de los bonos basura están cayendo, lo que apoya esta tesis. “Creemos que el mercado está exagerando los miedos”.

Sobre el S&P 500, indica que ha perforado los mínimos de ayer: “Eso es bajista”. No obstante, si los supera hoy rápidamente, sería “una oportunidad de compra”. Añade que, según el índice de “codicia y miedo”, los inversores muestran pánico, lo que podría implicar que “estamos en un suelo de mercado".

En el caso de Bitcoin, Cava afirma que el mercado “está limpio” tras la mayor liquidación de futuros de la historia y que los mineros y ballenas están vendiendo. La tendencia alcista de largo plazo “sigue intacta”, aunque a corto plazo “los bajistas tienen el control.” Si el precio confirma soporte entre 100.000 y 106.000 dólares y rebota, “se formaría un suelo y comenzaría un nuevo tramo al alza”. Concluye que, si esto coincide con una caída del oro, “Bitcoin recuperará la distancia perdida”.